Primeras Palabras de Pocahontas

Bueno, bueno, hoy está siendo un día muy frío; si ya lo predecía la noche anterior, que le vamos a hacer. Y es que el tiempo está revuelto como nuestro pequeño castillito donde se suceden temporales y estaciones tranquilas con tanta o más rapidez que las del tiempo exterior. Jo, si parece y todo que vayamos 100% coordinados con el parte meteorológico diario.
Nuestra Guerrero Luna ha estado de descanso, y ha recibido la visita de unas amigas muy especiales así que sabemos de muy buena fe que se lo ha pasado pipa junco con Mercury (que no se pierde una), empezaron el primer día con una merienda y tomando contacto, para terminar la noche de barbacoca Casera (nunca mejor dicho) y cantando por La Húngara. Por otro lado Mercury se nos ha enamorado, y está como un niño con zapatos nuevos, jejejeje si es que no se puede con él.
Luchito ha regresado de su descanso aunque sigue sin pisar ciertos aposentos de éste nuestro castillo, parece que las alergias primaverales le afectan de una manera poco tradicional diria yo y es que nuestro querido luchito sufre del mal del acoso femenino, o eso piensa él que arremete contra el sector a diestro y siniestro. Aunque dudo que ni la pequeña Lulú, Betty Boop, Nils Holgersson, Dulcinea, La Pulguita o Guerrero Luna... tengan el carácter de la Verdulera del castillo. La incompatibilidad que hay entre Luchito y la Verdulera, que no las únicas.... es cosa de ellos, mientras se tiren los juguetes a la cabeza.
Hoy nuestro querido Papá Pitufo, no ha dado señales ni muestra de su magnánima presencia, quizás tenga dolor de cabeza o esté disgustado con el comportamiento de Snoopy, que es un tanto revoltoso; aunque yo estoy más dedicada a esperar el Lunes la vuelta de Dulcinea a las lindes del castillo pues es la chica más tierna que lo habita, siempre con una sonrisa para todos a pesar del estado del tiempo al igual que nuestro querido Tintín, que parece que les han esculpido la sonrisa en el rostro como algo perenne de su expresión facial.
Bueno, por este momento creo que ya he explicado un poquito como se desarrolla un día dentro de los dominios de nuestro entono de cuento de los Hermanos Grimm. Dicho esto, me retiro a mis aposentos para descansar de otro día más del Castillo de los sueños.

Pocahontas.